domingo, 6 de noviembre de 2011

11/11/11: ¿QUÉ PUEDE OCURRIR EN EL CIELO Y EN LA TIERRA?


AÑO/CERO.Enrique de Vicente
Foto: TheMachineStops

Muchos se sienten obsesionados por el número 11, que se repite de forma inquietante en torno a los atentados del 11-S y el 11-M o en los impactantes sucesos acaecidos en días 11 de 2011. Algunos sospechan que todo podría apuntar al 11/11/11. En los días previos, el asteroide YU55 pasará frente a la Tierra, el gobierno americano ha programado la primera alerta nacional de su historia, está prevista una alineación cósmica del polémico cometa Elenin, el grupo Anonymous programa la destrucción de Facebook… ¿Simples coincidencias, un código inscrito en el inconsciente colectivo o premoniciones de un acontecimiento crucial?
¿Cómo explicar lo que a mí me resulta incomprensible?
Sin embargo, ese es precisamente el reto que afronta mensualmente una revista como la nuestra: intentar adentrarse en terrenos que otros medios informativos rehúyen por considerarlos inaceptables, transgredir las fronteras de eso que llamamos la realidad objetiva, para luego informar sobre los resultados de nuestra incierta búsqueda. Porque, parafraseando a Víctor Hugo, hay hechos que están ahí y, por incómodos que resulten, no podemos decirles «¡marcharos, no quiero veros!».Esta es la síntesis de una larga búsqueda personal. A finales de 1991, cierto rumor comenzó a circular en los restringidos círculos esotéricos a los que entonces estaba ligado. Se hablaba de la misteriosa apertura del Portal 11:11. Se decía que mucho tenía que ver con la misma un ritual celebrado en México D.F. por el Dalai Lama, el 11 de noviembre de ese año, durante la visita que éste cursaba a esa capital.

En enero de 1992, al regreso de mi primer viaje a Egipto, me enteré de que otro extraño ritual había reunido a más de un centenar de occidentales en la meseta de Gizá. Tuvo lugar en las fechas que yo pisaba esas tierras que, desde entonces, se convirtieron en mi segundo hogar.

A las 11.11 del 11 de enero de 1992, cientos de personas procedentes de varios países se concentraron en la meseta de Gizá. Allí participaron, durante todo un día, en rituales colectivos con los que pretendían contribuir a la elevación vibratoria o dimensional de nuestro planeta, mediante la integración de sus diversas individualidades, procediendo a la fusión de las energías celestes con las terrestres mediante la fuerza del amor. Quienes entonces iniciaron la «apertura del Portal 11.11», acudían a la convocatoria realizada por la visionaria Solara Antara.

1991 ciertamente había sido un año que quedará marcado en la historia. Una coalición de 34 países luchó en la Guerra del Golfo contra Irak, que en el verano anterior había invadido Kuwait. Se iniciaba así una confrontación internacional en Oriente Medio que aún no ha terminado y nos recuerda las profecías bíblicas sobre el Armagedón, que sitúan la batalla final en esa zona del mundo. Una nueva pesadilla venía a reemplazar a las cuatro décadas de guerra fría y temor nuclear que en ese mismo año se zanjaron con el fin del bloque comunista. El 10 de julio, Yeltsin comenzaba su mandato como primer presidente electo de la historia rusa y, al mes siguiente, el fallido golpe del sector duro contra el premier soviético Gorbachov desencadenaba el derrumbe de ese endeble castillo de naipes: la otrora temida URSS se desmembraba en quince repúblicas soberanas. Tan sólo un día después, el 11, sobre México tenía lugar un impresionante eclipse total de Sol, anunciado desde tiempos remotos por los astrónomos mayas… (Continúa en AÑO/CERO 255)
Fuente: www.akasico.com